Consejos para quitar manchas en los dientes

La sonrisa es uno de los rasgos más atractivos y atrayentes de la persona, por eso muchos buscan una manera de aclarar su dentadura; por ello te explicaremos qué debes hacer para quitar manchas en los dientes.

Los procesos de blanqueamiento dental, tanto caseros como profesionales, no duran para siempre. Los dientes tienden a mancharse con mucha frecuencia por los alimentos que consumimos (bebidas como mate, gaseosas oscuras y café) y por fumar.

Debes tener en consideración que, al quitar manchas en los dientes, tu dentadura puede volver a mancharse si consumes con demasiada frecuencia bebidas oscuras o si fumas, por lo que debes bajarle a su consumo para que los resultados sean más duraderos.

El cuidado dental también influye muchísimo. Si no cuidas tu dentadura, esta será mucho más propensa a la formación de manchas y que, con el paso del tiempo, tus dientes vayan adoptando un color amarillento y, además, sarro.

Para nuestra suerte, existen remedios caseros que pueden ayudarnos a quitar manchas en los dientes sin mucho esfuerzo y, lo mejor de todo: sin golpear mucho nuestro bolsillo por tratarse de elementos que probablemente tengamos ya en casa.

Quitar manchas en los dientes con bicarbonato

Quitar manchas en los dientes

Para quitar manchas en los dientes te recomendamos utilizar bicarbonato de sodio. Este producto se usa con muchísima frecuencia en el hogar, para su limpieza, y también en el ámbito de la medicina. Para blanquear los dientes debes seguir este procedimiento:

  • Bicarbonato de sodio: Es un gran producto para limpiar y, afortunadamente, funciona de maravilla para blanquear tus dientes. Solo debes mezclar ½ cucharada de bicarbonato y una cucharada de agua y cepilla tu dentadura como regularmente lo haces.
    • Puedes repetir este remedio tres veces por semana. Otra opción es, antes de cepillar tus dientes, colocar encima de la pasta una pizca de bicarbonato y fregar tu dentadura. Haz esto una vez por semana.
  • Agua oxigenada: Sus propiedades blanqueadoras te permitirán quitar manchas en los dientes. La forma adecuada de utilizarlo es como enjuague bucal, diluyendo una taza de agua y media taza de agua oxigenada.
    • Pero ten cuidado de no utilizar grandes cantidades de agua oxigenada. El abuso de esta sustancia puede ocasionar que tus encías se inflamen.
  • Aceite de coco: Aunque no lo creas, es de gran utilidad para eliminar manchas de tu dentadura y para otros usos de la higiene bucal por sus cualidades anti inflamatorias y anti microbianas. Lo mejor de todo, es un producto natural.
    • Solo debes tomar una cucharada del aceite y verterlo con cuidado en tus dientes. Puedes ayudarte con un cepillo de cerdas suaves o con tus dedos para frotar tu dentadura por 5 minutos aproximadamente. Luego enjuaga.
  • Frutas: El consumo de este tipo de alimentos es de gran ayuda en lo que concierne a nuestra higiene bucal. Algunas frutas que pueden ayudarte a quitar manchas de los dientes son:
    • La fresa, debido a sus cualidades blanqueadoras gracias a su contenido ácido málico. Hacer una pasta aplastando la fresa y aplicándola en tus dientes, frotándolos con un cepillo, puede blanquear tus dientes.
    • La naranja o el limón (cítricos en general) tienen muchísimos beneficios, sin embargo, te aconsejamos enjuagar tu boca luego de emplear este remedio porque su acidez puede ocasionar que tu esmalte dental se estropee.
    • La cáscara de banana, gracias a sus componentes (magnesio, potasio y manganeso), elimina aquellas manchas amarillentas de tus dientes. Solo debes frotar la cáscara varios minutos en tu dentadura todos los días.
  • Levadura de cerveza en copos: Solo debes combinarla con una pizca de sal hasta que se forme una pasta y puedas aplicarla como usualmente te aplicas tu dentífrico.
  • Carbón activado: Este producto elimina los microorganismos que generan la placa dental. Debes emplearlo combinándolo con agua hasta formar una pasta y cepillar tus dientes naturales (no coronas). Repite este procedimiento tres veces a la semana.

Cuidado con los remedios

Si bien los procesos de blanqueamiento dental, tanto químicos como caseros, son hechos con productos que no dañan tus dientes, sí erosionan tu esmalte. Siempre debes tener precauciones a la hora de realizar cualquier tratamiento por ti mismo.

Los tratamientos que emplean químicos o sustancias no naturales no deben realizarse con tanta frecuencia porque pueden adelgazar la capa de tu esmalte dental y ser más propenso a sufrir de sensibilidad.

Siempre es bueno investigar al respecto sobre los productos que vayas a emplear o, en su defecto, al dentista que realizará tu blanqueamiento dental. La dentadura es una parte esencial de tu cuerpo, por ello hay que cuidarla.

¿Por qué mis dientes se manchan con frecuencia?

Por qué se manchan los dientes

Primero, debes saber que es un proceso completamente natural: tus dientes no son originalmente blancos, sino decantándose más por un color hueso. Sin embargo, hay alimentos que, al consumirlos, manchan el esmalte dental, así como también hábitos.

  • Las bebidas que suelen ser de colores fuertes, como el vino tinto, el café o las gaseosas negras pueden generar con mayor frecuencia manchas en los dientes.
  • El hábito de fumar cigarros también ocasiona que los dientes poco a poco vayan tornándose de un color amarillento difícil de eliminar.
  • El consumo de alimentos y productos procesados, con niveles ácidos muy elevados, también son cruciales para la formación de manchas.
  • En ocasiones, la mera genética tiene muchísimo que ver. Tu ascendencia puede que influya en ello.
  • Hay ciertos diagnósticos médicos que pueden reflejarse en la dentadura. Esto puede suceder con mucha frecuencia, por lo que, si ves que tu dentadura está anormalmente manchada, lo recomendable es que visites a tu médico de confianza.
  • El consumo de algunos medicamentos (como ciertos antibióticos) de igual forma pueden acelerar el proceso de generación de manchas en tu dentadura.
  • El mal cuidado dental y bucal tiene muchísimo que ver: no cepillarse luego de cada comida, no enjuagarse la boca luego de ingerir alguna bebida tintada, entre otros hábitos.
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