Cosas de tu hogar que debes empezar a limpiar a mano
En la actualidad existen muchísimos trucos caseros y herramientas que tienen como finalidad asegurar una limpieza profunda y completa, sin embargo, no siempre es necesario el uso de esas técnicas u objetos porque hay algunas cosas que debes limpiar a mano.
Si bien estas técnicas y herramientas fueron creadas para asegurarte de que la superficie que limpies esté perfectamente higienizada y libre de gérmenes, tendemos a utilizarlas para zonas u objetos que no necesitan tanta rigurosidad en su limpieza.
Además, si evitas realizar este tipo de técnicas, también estarías guardando material que puedes emplear cuando realmente lo necesites, también gastarías menos agua y energía en herramientas de limpieza.
Materiales para limpiar a mano
Hay cosas que debes limpiar a mano por su difícil acceso a la hora de utilizar los instrumentos de limpieza comunes, ya sea por su gran tamaño, por su ubicación, entre otros.
Para ello, debes asegurarte de tener preparados los siguientes materiales:
- Llena a tres cuartos una cubeta con agua caliente y el detergente líquido limpiador de tu preferencia.
- Ten a la mano un pañuelo limpio y un cepillo para lavar.
- Si eres una persona perfeccionista, puedes también utilizar hisopos para llegar a esos espacios minúsculos y un borrador mágico. Esto es completamente opcional.
- Por último, y lo más importante, colócate unos guantes para limpiar que protejan muy bien tus manos de los químicos y el constante contacto con el agua.
Debajo de los equipos electrónicos del hogar
Con frecuencia, solemos limpiar las mesas y escritorios sin mover las decoraciones o los equipos electrónicos que hay sobre esas superficies. Es un error común que cometemos, pero que debemos erradicar pronto.
Es debajo de los electrodomésticos donde se suele acumular normalmente restos de comida o de ingredientes que utilizamos a la hora de cocinar. Estos residuos quedan almacenados ahí, llamando insectos y dejando en ocasiones mal olor conforme pasan los días o semanas.
También se suele acumular suciedad dentro de estos electrodomésticos (como el microondas, las hornillas, el interior del refrigerador, entre otros), por lo que es muchísimo más sencillo y efectivo asear estos espacios a mano para garantizar que ningún rincón quede sucio.
Estos espacios son unas de las cosas que debes limpiar a mano. Lo ideal es aspirar la zona para eliminar cualquier rastro de polvo y luego, para finalizar, fregar la superficie con el pañuelo húmedo. Si hay manchas impregnadas en la superficie, restriégalas con un cepillo.
Bordes del piso, paredes y puertas
Cuando pasamos el trapeador por la casa, se corre el riesgo de que la suciedad quede atrapada entre el pequeño espacio del piso y los bordes del mismo. Esa diminuta porción podemos limpiarla a mano con un pañuelo humedecido. Para manchas más profundas, puedes optar por utilizar el borrador mágico.
Puede que, mientras limpias las bases del piso, notes que tus paredes también necesitan un tiempo dedicado a su limpieza, por lo que lo ideal sería aprovechar la situación y pasarle un pañuelo húmedo por toda la superficie para eliminar posibles manchas.
Y ya que estás en ello, también podrías darle una limpieza a tus puertas para deshacerte de cualquier polvo, mancha o telarañas que pueda haber a su alrededor. Bastará con fregar con ayuda de un pañuelo húmedo todas las puertas de tu casa.
Espacios diminutos entre esquinas del hogar
Los pequeños espacios entre los muebles e inmuebles de nuestra casa suelen acumular con mucha frecuencia suciedad y polvo durante nuestra rutina de limpieza, estos lugares son tan diminutos que no son posibles de alcanzar con una escoba o trapeador.
El espacio que hay entre el piso y las aplicaciones antigolpes de tus gabinetes de cocina, o la zona que hay entre las molduras de un cuarto de pulgada adheridas a la parte inferior de la pared y el piso.
En la mayoría de los casos, para limpiar estos lugares basta con cubrir tu dedo con un pañuelo húmedo y pasarlo por esos pequeños espacios, utilizando la uña de tu dedo para tener mejor alcance y poder asear perfectamente el área.
En caso de necesitarlo, puedes hacer uso de un hisopo para evitar utilizar tus manos y eliminar cualquier rastro de polvo. Primero, pasa uno de los lados del hisopo, completamente seco, por la superficie. Luego, humedece la otra extensión y pásalo por la misma zona.
Los espacios que dividen las baldosas de tu baño también deberías limpiarlas a mano, pues, en ocasiones, trapear el piso no es suficiente.
Para ello debes utilizar un cepillo e ir restregando estas zonas por varios minutos, luego trapea el lugar. También puedes fregar las baldosas del piso de tu regadera.
Estas son algunas cosas que debes limpiar a mano en tu hogar. Asegúrate de tenerlas en cuenta a partir de ahora para que empieces a disfrutar de una casa higiénica y así un espacio impecable. Lo ideal es agregar estos pasos extra a tu rutina de limpieza cada dos semanas para mantener todo el lugar libre de polvo y suciedad.