¿Cómo quitar manchas de óxido de tu ropa de forma efectiva?
El roce constante de las piezas metálicas con la ropa puede resultar muy dañino para tu ropa, pues puede adquirir manchones molestos que son difíciles de sacar, por ello hoy descubrirás cómo quitar manchas de óxido en tu ropa.
Las manchas de óxido se generan al tener contacto con objetos metálicos que estén en camino a oxidarse. Esta suciedad le quita el atractivo a tus prendas y en un lavado normal suele ser muy complicado deshacerse de ellas.
En vista de ello, no está demás tener en cuenta algunos trucos caseros que sin duda te serán de utilidad para evitarte el problema de deshacerte de la ropa manchada. El objetivo de esto es no tener que botar tus prendas favoritas, sino conservarlas por tanto tiempo como sea posible.
Bicarbonato para quitar manchas de óxido
El bicarbonato de sodio ha sido desde siempre un gran aliado al momento de limpiar en el hogar y también puede ayudarte a quitar manchas de óxido de tu ropa. Este producto, combinado con agua, puede ser muy efectivo a la hora de quitar manchas.
- Combina partes iguales de agua y bicarbonato de sodio hasta que notes que la solución adquiere una contextura pastosa.
- Esparce la solución pastosa directamente sobre las zonas manchadas con óxido, asegurándote de cubrir cada parte de ellas.
- Friega la tela ayudándote con un cepillo que no vayas a usar más, con movimientos suaves para prevenir daños en la prenda, sobre todo si es una delicada.
- Deja actuar el bicarbonato por un par de horas.
- Aclara la ropa con abundante agua para deshacerte de los restos de bicarbonato de la tela.
- Lava la ropa como usualmente lo harías, siguiendo las indicaciones de lavado especificadas en la etiqueta.
Esto debería ser suficiente para quitar manchas de óxido de tu ropa. Sin embargo, si necesitas un método más potente, puedes mezclar el bicarbonato con vinagre blanco. Estos dos elementos juntos son capaces de deshacerse de casi cualquier suciedad.
- Combina en un envase dos cucharadas de bicarbonato y dos cucharadas de vinagre. Combina bien hasta obtener una solución pastosa.
- Esparce la solución pastosa sobre las manchas de óxido, cubriéndolas en su totalidad para no dejar resto de manchones una vez culminado el procedimiento.
- Frota las manchas ayudándote con un cepillo que no vayas a utilizar más, teniendo especial cuidado si se trata de prendas delicadas.
- Tiende la prenda al aire libre hasta que haya secado, el sol ayudará a que la mancha desaparezca.
- Una vez esté seca la ropa, procede a lavarla como usualmente lo haces, siguiendo sus indicaciones de lavado.
Sal para eliminar el óxido
Para quitar manchas de óxido de la ropa blanca, puedes recurrir a utilizar sal con limón. No es recomendable usar este remedio para ropas de color debido a que puede decolorar o dañar el tejido de la prenda.
- Extiende la ropa en una superficie en la que puedas trabajar sin preocuparte por mancharla o que absorba líquidos.
- Esparce las manchas de óxido con sal de mesa, cerciorándote de que cada espacio quede completamente cubierto.
- Exprime un par de limones en un envase y luego transfiere el líquido a un rociador, para que sea más fácil manipularlo.
- Rocía con el zumo de limón las manchas cubiertas con sal, hasta que el polvo quede húmedo.
- Debes dejar que el limón y la sal hagan efecto por un día, como mínimo.
- Lava la prenda como regularmente lo harías pasado el tiempo de espera. Asegúrate de seguir las indicaciones de lavado descritas en las etiquetas.
Al sacarla de la lavadora, las manchas de óxido deben haberse eliminado por completo. De no ser así, puedes realizar nuevamente el procedimiento hasta que hayas eliminado la suciedad.
Detergente lavavajillas para quitar manchas de óxido
En numerosas ocasiones el jabón para platos ha sido de gran ayuda para eliminar manchas de la ropa. En este caso, es de gran ayuda para deshacerte del óxido en tus prendas.
- Calienta un vaso de agua en la estufa. Cuando el agua esté templada, sin llegar a quemarte, añade una cucharada de detergente para platos y mézclalo muy bien hasta que el jabón se haya disuelto.
- En caso de ser poca cantidad, ya sea porque la prenda está muy manchada o porque son varias las que tienes que lavar.
- Humedece las zonas manchadas de la prenda, garantizando que quede completamente cubiertas con el líquido jabonoso.
- Deja reposar que la solución jabonosa para que haga efecto, por aproximadamente cinco minutos. Si notas que la mancha aún no se desprende, puedes esperar otro par de minutos.
- Aclara la ropa con abundante agua helada para deshacerte de los restos de jabón. No es necesario lavarla.
Si una vez terminado el procedimiento la mancha persiste en la tela, puedes hacer los pasos nuevamente hasta que la suciedad haya sido eliminada por completo. En caso de ser necesario, puedes intentar otro de los remedios caseros aquí explicados.
Consideraciones para lavar las prendas
Al momento de lavar la ropa para quitar manchas de óxido, debes tener algunos aspectos en cuenta para impedir perjudicar el estado de la prenda y tener los resultados que esperas.
- Lo ideal es eliminar la mancha de óxido justo luego de que la ropa la haya adquirido. Mientras más tiempo dejes pasar para limpiar la ropa, más difícil será el removerla.
- Usa los remedios caseros únicamente en las zonas manchadas, no en el resto de la prenda. Puede tener efectos adversos y estropear la prenda.
- Si la mancha no se ha eliminado por completo, no la metas en la secadora. El calor puede agravar en gran manera la situación y será mucho más complicado quitar manchas de óxido.
Estos consejos pueden ser de utilidad para que puedas tener los resultados que deseas sin necesidad de pasar por algún incidente que pueda dañar permanentemente la ropa y que, al final, debas botarla.
¿Cómo evitar las manchas de óxido?
La solución más efectiva es evitar a toda costa que las piezas de metal de tu hogar se oxiden. Por ello, ten en cuenta los siguientes consejos en tu casa para salvar tus prendas de obtener manchas de óxido, pues algunas son una pesadilla para quitarlas.
- Los metales que sean susceptibles a que se oxiden con frecuencia debes cubrirlos con pintura, barniz o una laca anticorrosiva. Todos estos productos puedes encontrarlos en el mercado, y protegerán tus piezas del óxido.
- En cuanto a las piezas de hierro, lo ideal es que los laves a profundidad, sécalos completamente y cúbrelos con alguna sustancia grasosa para protegerlos luego de su uso o antes de que vayas a guardarlos. Puedes utilizar lubricante o aceite.
El secreto universal para evitar el óxido es evitar que se humedezcan las piezas y, en caso de que haya sido así, debes secarlas perfectamente para que no quede humedad que pueda afectarlas. Así, cualquier objeto de metal o de hierro estará protegida del óxido y, a su vez, tus prendas no adquirirán manchas.